Comer en la mañana activa más el metabolismo y regula mejor el azúcar en sangre que comer en la noche. La hora de las comidas influye en cómo el cuerpo procesa la energía.
Un estudio muestra que comer lentejas o garbanzos antes de una comida grande ayuda a reducir el hambre y los picos de azúcar en sangre. ¡Las legumbres pueden ser clave para controlar el apetito! 🌱🍛